El proyecto de rehabilitación de aceras en el sector de las 200 de Camino Real de Betania ha sido una iniciativa integral para mejorar la infraestructura urbana y proporcionar un entorno más accesible y seguro para los residentes. La intervención se enfocó en la renovación de 143 metros lineales de aceras, con el objetivo de modernizar y optimizar el espacio peatonal en la zona.

Durante la ejecución del proyecto, se llevaron a cabo actividades que incluyeron la demolición controlada de las aceras existentes y la construcción de nuevas estructuras, incorporando materiales duraderos y estéticamente agradables. Este enfoque no solo buscó mejorar la funcionalidad de las aceras, sino también contribuir a la estética general del área, generando un entorno más atractivo y acogedor.

Un aspecto clave del proyecto fue la construcción de dos rampas en ambas esquinas, diseñadas específicamente para facilitar el acceso y la movilidad de personas con discapacidad. Estas rampas fueron estratégicamente ubicadas para garantizar la inclusión y cumplir con las normativas de accesibilidad, permitiendo a aquellos con movilidad reducida desplazarse de manera segura y cómoda por la zona.